El estado natural de la mente, es el pensamiento.
Los pensamientos afloran constantemente, pero no
les prestamos atención. Los dejamos pasar como
nubes y atraemos nuevamente nuestra atención
hacia el cuerpo, con dulzura. No nos identificamos
con esos pensamientos. Sólo somos conscientes de
nuestro organismo y de su respiración.
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Ser Conciiente del presente
Practicar Qi Gong (Tai Chi) es una forma de retornar a la presencia de uno mismo, de hacerce conciente del instante que pasa.
_Ahí donde el gesto va, el Chi va, la consciencia va y la presencia es_
dice un Principio Tradicional.
La ejecución del gesto requiere una atención, un espiritu alerta, una presencia en el aquí y ahora.Los movimientos lentos y pausados permiten tomar conciencia de cada instante, como si cada gesto desgranara el Tiempo. Es como si la conciencia despertara de un sueño y aflorara el Presente. No hay una meta, un objetivo a lograr.
Se esta inmerso en la corriente del tiempo, participando de cada instante........
Ser capaces de percibir el rumor quedo de las hojas, un destello de luz o el revoloteo de una mariposa al mismo tiempo que se perciben las sensaciones interiores; poder acojer cada cambio, integrandolo sin perder la sensación de centro.........
La atención se fija de manera simultánea tanto en el exterior como en el interior, percibiendolo como un Todo. Es una meditación en movimiento.
Hermosa Perla del Libro
QI GONG PRÁCTICA CORPORAL Y PENSAMIENTO CHINO
Isabel Calpe Rufat
isbn: 84-7245-541-6
1 comentario:
Hola amigos-as:
Precisamente esta es la belleza del tai chi. Permite a los que nos dedicamos a su práctica disfrutar de momentos que nos somos capaces de alcanzar mediante la práctica de otras actividades físicas y deportivas.
Tomar conciencia de uno mismo, de sus sensaciones internas, y, a la vez, del entorno exterior, disfrutando en calma de cuanto acontece en el presente, en el ahora, es una gozada.
Claro que, para poder disfrutar de estos momentos es necesario algo de práctica, llevar algún tiempo en esto del tai chi. Por eso, a todos-as aquellos-as que acabáis de empezar y leéis estas líneas os animo a seguir practicando para que, con el tiempo, podáis disfrutar de las sensaciones expresadas en las líneas de esta entrada.
Un fuerte abrazo a todos-as. Os quiero.
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